La importancia de la autoexploración de la mama
El cáncer de mama es uno de los más comunes entre las mujeres a nivel mundial. A pesar de los avances en su tratamiento, la prevención y la detección temprana siguen siendo herramientas clave para mejorar la supervivencia y calidad de vida. En este artículo, exploramos los factores de riesgo, los primeros síntomas que podrían pasar desapercibidos y la importancia del autoexamen.
Factores de riesgo que aumentan las probabilidades de desarrollar cáncer de mama
Existen varios factores que pueden incrementar el riesgo de desarrollar cáncer de mama. No todos los casos se deben a estas causas, pero conocerlos puede ayudarte a estar más alerta.
- Edad: A medida que una mujer envejece, el riesgo de desarrollar cáncer de mama aumenta, especialmente después de los 50 años.
- Historial familiar: Tener familiares cercanos que han tenido cáncer de mama aumenta considerablemente el riesgo.
- Factores genéticos: Las mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 están asociadas a un mayor riesgo de cáncer de mama y ovario.
- Ciclo menstrual: Comenzar la menstruación antes de los 12 años o experimentar la menopausia después de los 55 años incrementa la exposición a estrógenos, lo que puede aumentar el riesgo.
- Factores reproductivos: Las mujeres que no han tenido hijos o que han tenido su primer hijo después de los 30 años presentan un mayor riesgo.
- Terapia hormonal: El uso prolongado de terapia hormonal combinada (estrógeno y progesterona) durante la menopausia aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de mama.
- Estilo de vida: Fumar, beber alcohol en exceso, tener sobrepeso y la falta de actividad física son factores que también pueden contribuir.
Señales o síntomas iniciales que podrían pasar desapercibidos
Muchas veces, los primeros signos del cáncer de mama pueden ser sutiles y fáciles de ignorar. Aquí te dejamos algunos de los síntomas iniciales que podrían indicar la presencia de un problema, y que suelen pasar desapercibidos:
- Cambios en la piel del seno: La aparición de enrojecimiento, la piel con textura de “cáscara de naranja” o áreas hundidas en el pecho son señales de alerta.
- Bultos o nódulos en el seno o la axila: No todos los bultos son malignos, pero uno nuevo o que crece con el tiempo debe ser evaluado.
- Dolor persistente en el seno o pezón: Aunque el dolor no siempre es un indicativo de cáncer, si es localizado o constante, merece una consulta médica.
- Secreción inusual del pezón: Cualquier tipo de secreción que no esté relacionada con la lactancia, especialmente si es sanguinolenta, debe ser investigada.
- Cambios en el pezón: Si notas retracción, inversión del pezón o alguna modificación en su forma o apariencia, es importante que consultes a un especialista.
¿Con qué frecuencia deberías realizarte un autoexamen de mama?
El autoexamen de mama es una herramienta simple que te permite familiarizarte con tus senos y detectar cualquier cambio inusual. Se recomienda realizarlo una vez al mes. Si todavía tienes menstruación, lo ideal es hacerlo unos días después de que termine, cuando los senos están menos sensibles. Para mujeres que ya han pasado la menopausia, elegir un día fijo del mes para el autoexamen es una buena opción.
Pasos para realizar correctamente un autoexamen de mama:
- Frente al espejo: Con los brazos en diferentes posiciones (a los lados, levantados y presionando las manos en las caderas), observa si hay cambios en la forma, el tamaño o la textura de tus senos.
- Palpación de pie: Con una mano detrás de la cabeza, usa los dedos de la otra mano para palpar todo el seno y la axila con movimientos circulares, desde el exterior hacia el centro.
- Palpación acostada: Colócate boca arriba con una almohada bajo el hombro y el brazo detrás de la cabeza. Usa movimientos circulares para revisar todo el pecho y axila.
Como profesionales sanitarios es de vital importancia conocer todos estos aspectos para concienciar y aconsejar bien a tus pacientes. Contar con formaciones adecuadas que te preparen bien como nuestro Curso de Oncología Ginecológica, marcará la diferencia. ¡Contigo, la lucha será más fácil!